Hola amig@s, esta receta que os
pongo a continuación la he visto en el canal de Esbieta. Me ha parecido genial
y muy apetitosa y creo que es ideal para este tiempo que estamos pasando todos
de confinamiento en casa. Receta de pan rústico sin amasar hecho en casa con
harina normal de trigo, agua, sal y levadura seca de panadería. Esta hogaza de pan
nos durara tierno por dentro y crujiente por fuera varios días de la semana.
INGREDIENTES:
1 kg de harina de trigo común, la
de todo uso
18 gr de sal
650-700 ml de agua (Yo he puesto
700 ml)
9 gr de levadura fresca ó 3 gr de
levadura de panadería seca (Yo he puesto levadura seca)
ELABORACIÓN:
Vamos a hacer el levado de la
masa tal y como explica Esbieta en la nevera para que así salga la masa
perfecta y con un sabor increíble a pan rústico de los de antaño. Comenzamos
echando la levadura con el agua templada y mezclamos bien. A continuación
añadimos la harina tamizada con la sal y mezclamos todo muy bien en el mismo
recipiente hasta quedar todo bien mezclado y homogéneo sin grumos. El resultado
es de consistencia bastante liquida.
Ahora tapamos el recipiente y metemos 30
minutos en la nevera. Pasados los primeros 30 minutos sacamos el recipiente de
la nevera y veremos que la masa está empezando a tomar consistencia. Nos
mojamos las manos con agua y metemos la mano en el recipiente para empezar a
estirar con cuidado de no romper la masa con unos pliegues de un lado hacia el
otro y dejamos caer sobre sí misma una 5 a 6 veces y volvemos a meter otros 30
minutos en la nevera.
Este paso hay que hacerlo 3 veces con tandas de 30
minutos en la nevera.
Por última vez es decir la 4ª vez, hacemos el plegado nuevamente y metemos la
masa en la nevera 2 horas seguidas.
Pasadas las 2 horas sacamos la masa de la
nevera y cogemos un paño limpio de cocina y lo impregnamos con harina. Ahora vamos
a formar el pan pero fuera del recipiente, lo vamos a hacer en la mesa de
trabajo. Enharinamos la mesa y con cuidado sacamos del recipiente la masa y
despacito vamos haciendo los últimos pliegues dando forma al pan. Ponemos el
paño dentro del recipiente e introducimos dentro la masa y le echamos por
encima harina y tapamos con el paño y dejamos esta vez levar fuera de la nevera
hasta duplicar su tamaño.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTcTHYDzbrRazGhoonqfpMqYTD8UwPT13MF4NQ32ySYIQQeSELQ3eh0Vxb-Adrkg-XPZAwCicUa4EP7Kfw9tnydSPACsDvgJFRr80LsRwGX0-s3rEItOP9RcglQT9f_kxcX__GFgt7ciKV/s200/20200405_185629.jpg)
Unos 20 minutos antes de acabar la fermentación
encendemos el horno con la función arriba y abajo a 230º. Ponemos una bandeja
en la parte de abajo en el fondo. Esta bandeja será para echarle un vaso de
agua y haga la función de vapor y humedad y la otra bandeja encima para hornear
el pan. Ahora cogemos papel de hornear y lo ponemos encima de una tabla de madera
que nos servirá, para transportar el pan a la bandeja del horno y sobre este
papel volcamos el pan con cuidado para que no se deforme y le echamos por
encima un poco mas de harina y le hacemos también unos cortes transversales sobre
la superficie de la masa.
Ahora ponemos la masa con el papel en la bandeja del
horno y echamos debajo en la otra bandeja el vaso de agua caliente para que
haga el vapor y cerramos inmediatamente la puerta del horno. Horneamos a esta
temperatura durante 15 minutos y pasado este tiempo, bajamos la temperatura a
180º .
Seguimos horneando durante 1 y 40 minutos aproximadamente, depende de
cómo os guste de tostado. Yo lo he tenido un hora y media en mi horno. Ahora lo sacamos y
dejamos enfriar sobre una rejilla hasta estar completamente frío. Y a degustar
amig@s con lo que más os apetezca!!!
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